Me llamo Liora García Sánchez y soy acompañante de Biodescodificación.
La primera vez que escuché hablar de Descodificación fue años atrás cuando conocí a
una persona que había sanado de un lupus en un curso de formación. Su historia me
impresionó muchísimo y me dije que en algún momento estudiaría esta terapia.
Un tiempo después un amigo me presentó en una cena a un biodescodificador.
Tuvimos unas conversaciones muy interesantes y en los días siguientes hice muchas
tomas de conciencia. Así volvió a llegar a mí y a sorprenderme de nuevo muy
gratamente.
Hasta que en pandemia la vida me obligó a parar y aparcar las actividades artísticas
que estaba llevando a cabo. Para mí fue un tiempo regalado, de conexión conmigo
misma y reconexión con mi familia. Durante cuarenta días no salí de casa, fue como
una cuarentena espiritual. En ese tiempo decidí que quería ponerme al servicio a
través de la terapia. Empecé a formarme en la Escuela Francesa de Biodécodage de
Christian Flèche, creador de la Descodificación Biológica, que es una terapia
complementaria a la medicina alopática y que en ningún caso la sustituye.
Consiste en buscar el origen emocional de las enfermedades, dolencias, problemas
emocionales, o situaciones o patrones que se repiten, a partir de los códigos que
descubrió Flèche. Él era enfermero y durante las horas que compartió charlando con
los pacientes en el hospital, se dio cuenta que ante determinadas patologías, los
pacientes tenían las mismas emociones. Los códigos que descubrió, que tienen que ver
con la fisiología de los órganos y tejidos, están recopilados en diferentes libros y es
parte de lo aprendemos en su escuela. Entiende la enfermedad como la mejor solución
del cuerpo a un conflicto al que no ha encontrado salida. Es la adaptación que hace a
un instante conflictual.
La Descodificación tiene su origen en la nueva medicina germánica del Dr. Hamer con
quien Flèche trabajó al principio y se basa en el sentido biológico de los síntomas.
Después de perder un hijo de forma trágica el Dr. Hamer desarrolló un cáncer de
testículo y su esposa un cáncer de mama. Esto le llevó a preguntarse si había
correspondencia entre ambos eventos.
Simplificando mucho se podría decir que el cáncer de testículo es la solución
inconsciente del cuerpo para generar más células para tener otro hijo. Y en el caso del
pecho generar más células en el órgano que protege al hijo a través de la alimentación.
La enfermedad se instala en un momento específico que nosotros llamamos Bioschok.
Que es un instante concreto donde se vive una situación dramática, inesperada, en
soledad y que para la persona no tiene solución.
A través de protocolos de PNL (Programación Neurolingüística) el terapeuta acompaña
al paciente al momento del Bioshock para reconectar con la situación vivida y con las
emociones que sintió, validándolas y aceptando lo ocurrido, buscando qué
necesidades no tuvo cubiertas en ese instante. Después hay un aporte de recursos y un
nuevo reencuadre al conflicto.
Se trata de sanar ese momento y “desactivar el programa” que generó la enfermedad.
La puerta de entrada de la enfermedad es a su vez la puerta de entrada a la sanación.
La solución simbólica en la terapia es una solución real ya que el inconsciente no
diferencia lo real de lo imaginario y el tiempo no existe para él.
Sanar es estar en armonía, en equilibrio corporal y mental, sintiéndose en paz con
todos los momentos de nuestra historia.
Pongo mi corazón, mi escucha y mi experiencia para acompañarte a sanar.
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